La Kut/Doc y su “Democracia”: La vida en 9 canciones

El otro día fui a ver a La Kut junto al Doctor Pez, en una presentación en vivo en un local llamado Thelonius, ubicado en pleno corazón del jet set de locales destinados a la música en vivo en el barrio Bellavista, en Santiago de Chile. En el lugar se convocaron varios asistentes que no sé si específicamente iban a ver a La Kut con Doctor Pez, pero no tengo dudas que se llevaron una gran sorpresa. La mayor parte del repertorio que La Kut y Doctor Pez (Luis Pezoa) tocaron ese día pertenecía al disco que lanzaron el año pasado, llamado Democracia.
Esta es una obra que abarca nueve canciones de autoría del Doctor Pez que, ordenadas cronológicamente, dan la conceptualización del paso del tiempo en el ser humano, partiendo desde la premisa nace – crece – se desarrolla – muere. Cabe señalar que estas composiciones son de obras publicadas con anterioridad en la vasta discografía del Doctor Pez y que Ulra (como muchos lo conocen) arregló y adaptó para La banda.

Antecedentes
El disco, estrenado el 28 de abril del 2022, tiene la gran virtud de atravesar diversos estilos musicales sin perder el sonido característico de la obra del Doctor Pez y las triquiñuelas free jazzeras de La Kut. En este caso, los arreglos que adaptan la obra del cantautor para ser ejecutados por la banda estuvieron a cargo de Raúl Díaz, bajista y director musical de La Kut. Díaz, además, oficia la labor de baterista en otra agrupación en donde trabaja desde hace 25 años con el mentado Doctor Pez: Solteronas en Escabeche.
El comienzo de todo fue en 2004, cuando este grupo de amigos se pone el nombre de La Kut (Konfusión Unitaria Transformista) y se lanza con un ensamble híbrido de experimentación sonora e improvisación libre, donde las diversas influencias de cada elemento dan como resultado un primer disco homónimo que aparece en 2007. Luego estrenan Un Minuto de Silencio (2020) y Democracia (2022). Por otro lado, Doctor Pez posee una prolífica carrera como compositor, además de ser parte de la mencionada banda de punk progresivo Solteronas en Escabeche. De forma paralela, posee más de 27 discos (quizá más ocultos o desperdigados por ahí). Así que estamos adentrándonos en el mundo de dos protagonistas del underground chilensis.
Las Canciones
Devuelto al Mar abre el telón de esta obra. Una canción que entra con un ritmo pegado, constante, que asoma lentamente a los bronces que hacen su presentación. Acá nos hablan del objeto fallido, de cómo el ser viene con errores genéticos que uno debe cargar como una mochila. Todo explota en una fanfarria que te introduce en un camino de intensidad creciente, sin monotonía ni repeticiones gratuitas.
En Senil, entramos a un relato de alguien que siente que la vida le pesa, los huesos le duelen y el paso del tiempo hace mella de su integridad. Además, se aboga al hecho de que muchos personajes se dicen que nacen viejos, que nacen con el aura de una persona en el ocaso de la vida. Sin embargo, esta misma cualidad (o defecto) les hace tener un punto de vista más suspicaz ante lo que la existencia te depara.
Speculum es el ruego por atención, es el llamado de atención, el “estoy aquí”. Siempre manteniendo la tensión y el pulso compulsivo, La Kut asume el rol de una banda de serenata que acompaña a este cantor que busca respuestas a sus preguntas. Así nos introduce a Íntima, una hipnótica canción de amor, pero una especie de amor romántico, ese idealizado. Es una especie de crítica a la presión que ejerce una pareja en su igual con el fin de cambiar su esencia. Sin embargo, el simbolismo sonoro acá se presenta en una forma de caída, como cuando la voz dice “Es por eso que me siento con derecho a pedirte más”, los bronces descienden y te llevan al fondo del abismo.
La canción que da nombre al disco, Democracia, está sostenida por los bronces y la voz de Doctor Pez en una especie de opereta borracha en que aparecen los fantasmas del pasado de una sociedad truncada. Una generación completa de jóvenes que creyeron en un proyecto que, supuestamente, iba a cambiar la cara de este país triste por uno más luminoso. Sin embargo, nada de eso ocurrió, todo se queda en un papel y la canción termina diciendo “Todo fue una mentira. Todo termina”.
Con Bebé a Bordo es imposible no moverse. Acá la algarabía se hace presente con rítmicas más afro que recuerdan a Fela Kuti o a Mulatu Astatke. Por lo mismo, según varias teorías de la humanidad, el poblamiento del mundo partió desde la Madre África, lugar de origen de muchas de las melodías y ritmos que hoy por hoy causan fiesta y que todo se mueva. En el caso de La Kut/Doc, las alocadas situaciones en la que se enfoca la letra, que cuando llegas al mundo debes adentrarte en una vorágine de decisiones, de encrucijadas que terminan determinando tu camino.
Las tres últimas canciones anuncian que la muerte se hace presente. En Danza Negra nos adentramos al tema de irse de este mundo, pero visto desde la negación, asumiendo que es parte de la vida misma. Intentando aletargar este trámite, pero sabiendo que es inevitable. Crack toma el rol de la aceptación, de cuando ya hemos finalizado nuestra vida, cuyo relato proviene desde ese lugar al que vamos luego de dar el último suspiro. Ambas composiciones se unen en concepto, pero son diversas e inquietantes. La primera entra lento, con bronces que aparecen en una danza somnolienta; en cambio, en la segunda, nuevamente aparecen los ritmos hipnóticos para dar un tono más ritual a la obra.
Finalizamos con Vertebral, que nos llega desde el estado más etéreo, en donde el ente que cuenta esta historia se siente rodeado de una nada en donde busca respuestas. Además, se convierte en el telón que da final a un álbum singular, con una visión más experimental, con sonidos electrónicos, sintetizadores y otros recovecos sonoros.

Con esta presentación, es la tercera vez que tengo el placer de escuchar en vivo Democracia de La Kut y Doctor Pez. Debo decir que siempre termino gratamente sorprendido, pues la versatilidad, la fuerza y la furia de las composiciones se convierten en un testimonio vivo del trabajo realizado entre estos dos universos musicales. Sin lugar a dudas, una obra que te llama al análisis más profundo, no sólo estético, sino que existencial y humano. Lo que me provoca inquietud constante es que, siendo un disco de tales características, un crossover de grandes emblemas del under nacional chileno haya pasado tan desapercibido. Lamentable, pues si pones en una balanza esta obra versus los sencillos del recién estrenado músico urbano regalón de Spotify, por peso y calidad, Democracia sería el ganador. Pero el algoritmo decide otra cosa. Por eso, dejo la responsabilidad en tus manos. Tú decides.