«Suciedad Contemporánea» de Ábrete Gandul: Critica instrumental con filo
El ensamble chileno Ábrete Gandul ya es un clásico de la escena del rock progresivo latinoamericano. Activos desde 1999, hoy nos entregan en «Suciedad Contemporánea» su quinto álbum de estudio, que reafirma su compromiso de como la música experimental puede ser un poderoso vehículo de crítica social.
Concebido como un álbum totalmente instrumental, este disco representa el debut de la banda con el sello mexicano Azafrán Media, mostrando un sonido maduro que equilibra la agresividad del rock progresivo vanguardista, la libertad del avant garde y la agilidad del jazz fusión.
Grabado y mezclado entre enero y marzo de 2025 en Estudios Paraíso de Santiago de Chile bajo la ingeniería de Francisco Aguilera, «Suciedad Contemporánea» fue posteriormente masterizado en abril por Udi Koomran, figura reconocida de la escena RIO (Rock in Opposition). Estas condiciones técnicas de excelencia se reflejan en la calidad sonora del álbum, que logra capturar la potencia cruda del grupo con un sonido cálido, sin sacrificar claridad ni detalle.
En cuanto a su trasfondo conceptual, el álbum ofrece una crítica ácida y directa a la corrupción y falsedades de la sociedad moderna. El propio título «Suciedad Contemporánea», un juego de palabras que realiza paralelismos con «sociedad», sugiere la “suciedad” moral de nuestros tiempos, y cada pieza aborda algún matiz de ese concepto.
De hecho, según declaraciones de la banda, el orden institucional actual queda reducido a un «espectáculo donde la verdad es opcional y la ética negociable”. Esta temática impregna la música, otorgándole un cariz oscuro e intenso que conecta con corrientes del ya mencionado RIO, y la música progresiva de vanguardia, pero también con una sensibilidad contemporánea muy acorde a los tiempos que corren en temas musicales.
La formación de Ábrete Gandul en este trabajo está conformada por un cuarteto de talentosos multiinstrumentistas, acompañados de un invitado especial. Tenemos a los miembros fundadores Rodrigo Maccioni en guitarras eléctricas y flauta traversa, Antonio «Toño» Arceu en batería y percusión, más Jaime Acuña en piano acústico y teclados, Cristián Larrondo en Chapman Stick, y a Alfonso Vergara como guest en clarinete, siendo un colaborador previo como integrante del ensamble Asceta.
Esta encarnación del grupo demuestra una química notable, donde cada músico contribuye con su virtuosismo a un sonido de conjunto sólido y bien equilibrado, sin opacarse entre sí.
Basura de hoy
A lo largo de «Suciedad Contemporánea», Ábrete Gandul despliega siete composiciones instrumentales que, además de mantener una coherencia temática, exploran diversos matices dentro de su eclecticismo acostumbrado.
El álbum abre de forma densa con “Santos en la corte”, destilando una guitarra atonal solitaria que funciona como prólogo, tras el cual irrumpe todo el ensamble en una amalgama disonante pero fluida. Al asentarse el groove central, se revela una atmósfera sombría, muy propia de las vetas más experimentales del prog. Sobre un sofisticado swing de batería y líneas del Stick, la pieza construye un ejercicio de progjazz con tintes crimsonianos.
La segunda pista, “Tráfico de influencias”, incrementa la tensión expresiva, en parte ayudados por la guitarra y el swing jazzero de la batería, produciendo pasajes de buenas dinámicas, contrastando secciones agresivas con otras más melódicas. Sin duda, uno de los puntos altos del trabajo.
En “Atomización ideológica”, los gandules viran hacia terrenos más luminosos y ágiles, con claras texturas de jazz fusión, oscilando entre pasajes melódicos y acentos progresivos angulares.
La cuarta pieza, “Colusiones y corrupciones” retoma la intensidad precedente, en un lenguaje claramente ganduliano. Las guitarras entregan riffs de peso, mientras los teclados alternan entre psicodelias y disonancias avant prog; todo mientras se balancea potencia y sofisticación, con ricos detalles.
En “Sociedades y suciedades” la banda profundiza el carácter oscuro del álbum, con interesantes trallazos de heavy avant moderno. Abundan los riffs lúgubres y retorcidos, con ecos de Henry Cow, e incluso Stick Men; mientras los teclados dejan caer verdaderas cascadas góticas en ciertas secciones. Por su parte, la batería y el stick sostienen estructuras rítmicas en métricas complejas con una precisión milimétrica. Sin duda una de las grandes cartas de presentación de lo capaz que puede llegar a ser el sonido de Ábrete Gandul.
“Corruptela a la carta” es otra de esas composiciones abstractas y angulares. Sobre métricas extrañas, el grupo explora sonoridades que coquetean con la música docta contemporánea, gracias a su construcción tímbrica y armónica poco convencionales. Destaca la flauta, que aporta un matiz onírico, antes de un breve pasaje expresionista, donde la intensidad aumenta a piacere.
Los ocho minutos y cinco segundos de “Crónicas inmorales” clausuran la obra sintetizando los elementos desarrollados previamente. Condensa las agitaciones siniestras de «Santos» con la majestuosidad de «Sociedades«, mientras que al final tenemos una suerte de jazz rock trepidante y virtuoso, donde todos los integrantes brillan para cerrar con un golpe seco y definitivo. Todo dicho.
Un clásico de la escena avant
«Suciedad Contemporánea» tiene matices dignos de atención. Es un trabajo como pocas bandas podrían destilar, que confirma a Ábrete Gandul como uno de los exponentes más creativos de la avanzada progresiva latinoamericana. A lo largo de sus correctos 48 minutos, el disco ofrece una verdadera montaña rusa pulcramente ejecutada, de esas que revelan nuevos detalles en cada escucha.
El resultado es una obra rica, ingeniosa, magistralmente arreglada, y disfrutable de principio a fin para los oídos más versados en las aguas proggy. Los gandules reafirman como la vanguardia chilena y latinoamericana sigue viva, entregando música tan atrevida y crítica, como apasionante.






